Actos del Domingo de Pasión (V Domingo de Cuaresma)

Esta mañana en la Parroquia Matriz de Nuestra Señora de la Concepción, tuvo lugar a las 11:00 horas la Celebración Eucarística en honor del SANTÍSIMO CRISTO DEL RESCATE, presidida por su párroco, D. Jorge Fernlandez, la homilía corrió a cargo del Ilmo. Sr. D. Eduardo Rodríguez Rodríguez, Delegado Diocesano para la Promoción de la Nueva Evangelización. A continuación, se procedió a la procesión acompañada de la Cofradía del Santísimo Cristo del Rescate y Nuestra Señora de los Dolores por el trayecto de costumbre.

La Cofradía del Santísimo Cristo del Rescate y Nuestra Señora de los Dolores, Fue fundada el 25 de abril de 1979 por un grupo de miembros de la Cofradía del Lignum Crucis, coincidiendo con su vigésimo quinto aniversario. Aprobados sus estatutos por el obispo Franco Cascón en marzo de 1980, ese mismo año procesionó por primera vez. En 1991 fue elegida una mujer como hermana mayor, la primera de una cofradía de Semana Santa en la ciudad.

Viste túnica de color negro por la cofradía de la Piedad y el Lignum Crucis; capuchón y capa de color azul cielo por la Purísima Concepción; y a la cintura se ciñe una faja de color rojo por la Hermandad del Santísimo. En el pecho lleva la insignia de la cofradía, una cruz rodeada de una corona de espinas y en el centro un corazón y una S.

Santísimo Cristo del Rescate

Fue adquirido en 1558 y reformado a mediados del siglo XVIII. A lo largo del tiempo recibió culto bajo los títulos de la Antigua, el Buen Viaje y la Buena Muerte. Según una tradición, estuvo a punto de ser vendido en el siglo XVII a la parroquia de la Concepción de Santa Cruz y una humilde vecina lo evitó pagando su coste, pues decía haber escuchado «Rescátame, rescátame» cuando declavaban la efigie. Antiguamente salía en procesión el Miércoles de Ceniza.

Nuestra Señora de los Dolores

Considerada la Predilecta de su autor, el grancanario José Luján Pérez, la imagen fue cedida a la Iglesia de la Concepción en abril de 1803 por el portugués Felipe Carvalho Almeida, natural de Madeira. Desde entonces, la efigie presidió los cultos que la Hermandad del Santísimo Sacramento celebraba cada Viernes de Dolores. Es obra de candelero, concebida para situarse al pie de la Cruz, y muestra una actitud declamatoria o suplicante, una solución efectista inspirada en grabados y láminas devocionales.